lunes, 28 de julio de 2008

Háblame

Acércate y siéntate frente a mí mientras esta suave brisa intenta crear un poco de atmósfera entre los dos. Háblame. Cuéntame cualquier cosa, lo primero que se te ocurra. Yo te oiré enlazar palabras y haré ver que te escucho, como si de verdad supiera de qué estás hablando. Te miraré a los ojos y tú me aguantarás la mirada. Luego yo te explicaré lo que me sucedió el otro día, tú sonreirás y asentirás con la cabeza, haciendo ver que te interesa el tema de conversación.


Ni a ti te importa lo que yo te cuento ni para mí son relevantes tus historias, pero sabemos que, cuando todo esté en silencio, los dos nos sentiremos incómodos.




-Lo único que me importa es escuchar el tono de tu voz...

4 comentarios:

m3r1 dijo...

¿Sabes una cosa que me encanta?
La sensación de cuando conoces a alguien y la ves por primera vez y no dejas de hablar, como si formase parte de tu vida desde siempre... Y que el simple hecho de escuchar su voz te de tanta confianza y seguridad...
:)
Algo así me pasó con Marieta y Raquel ^^ tu, serás la próxima.

Amara dijo...

ya he cojido todos los textos,y est es el 157 ^^

menud apasada no??

Me ha encantado esta entrada :)

nitus

t'estimo cosineta

Anónimo dijo...

Suele suceder en ciertos caso. Entonces, por qué callar, mejor se habla y se paladea la voz o el silencio del otro.

Muy bonito Eris.

Besos

Phaeton dijo...

Y que sorprendente que es que unas palabras puedan dar tan en el clavo lo que llega siendo estas situaciones. Desde luego, muy bonito, sobretodo la frase final... Sabes urgar en los corazones eeeh :P


Pitunasus!


Soy el Toni